EL PROYECTO DE NACIÓN DE AMLO.
Pasado el día de las calaveras, pasaré a comentar lo que nos espera
con el “Nuevo Proyecto de Nación” del presidente legítimo, y sus asesores
expertos en materia de socialismo extremo o economía de Estado.
Empecemos por decir que tiene razón en sus puntos generales para
componer la economía del país, y de paso resolver el problema de la
desigualdad social: Sí, es
cierto, las empresas de mayores ingresos no pagan los impuestos que le
corresponden y en consecuencia en “nada” contribuyen al gasto público.
Antes,
el gobierno en turno manejaba las finanzas públicas bajo los
procedimientos
practicados por el PRI desde su fundación, y así le tocó el turno a un
súper
neoliberal, para darle paso a lo que ya se venía gestando, por supuesto
dentro del propio PRI. Me refiero a Carlos Salinas de Gortari.
Sólo que la jugada no salió bien y “alguien” decidió eliminar al
sucesor que no había salido de la misma caja de “sorpresas”
electorales; y surgió de la “nada” Ernesto Zedillo Ponce de León para
cargar con la corrección del rumbo, pero dentro del mismo ritmo
dictatorial;
razón por la que volvió a fallar, pero ahora bajo el influjo de los que
ya estaban cansado de sostener la dictadura “virtual” sin que salieran
“electos”. O beneficiados políticamente en lo que anhelaban Y gracias a
ese
desorden no calculado fue elegido candidato sucesor Luis Donaldo
Colosio.; Y
decidieron eleminarlo por la vía rápida: el asesinato. Y así “nació”
Ernesto
Zedillo Ponce de León.
Pero “alguien” no calculó que aquellos insatisfechos se propusieran
fortalecer la “izquierda” hasta entonces debilitada, y montados en ella y
en
la retirada de quien se dice le ganó Salinas, pero a la mala, surgió el
ingeniero Cuauhtémoc Cárdenas, quien decidió no defender su triunfo. Y
claro,
muchos como él, se le unieron para intentar coronar los esfuerzos
reivindicadores de la “Democracia” que les permitiera una nueva esperanza
de
lograr sus propios sueños de grandeza. Y surgió otro líder inconforme con
el
PRI: AMLO. Y en esas andamos.
Cierto, las luchas sociales se dan para cambiar algo; pues de lo
contrario no tendrían razón de existir. Y como “todo por servir se acaba y
acaba por no servir”, este “sabio” dicho popular le llegó al PRI con la
designación de Ernesto Zedillo. El PRI necesitaba con urgencia un cambio
drástico luego del asesinato de Luis Donaldo Colosio, y eso facilitó las
cosas. Salinas aceptó a Zedillo y Zedillo decidió acabar con la dictadura
que
ya no era posible sostener. Colosio había muerto asesinado para que se
rompiera la cadena del dedazo. Y se logró, aunque sin rumbo definido, y
por
supuesto fortaleciendo la rebelión interna.
¿A qué viene todo esto que nada nuevo aporta? Pues a que debemos
tener cuidado con el canto de las sirenas, y retomemos lo propuesto en el
“Nuevo Proyecto de Nación” en permanente confección, porque como
propuestas
se oyen bien; pero requieren de un plan de implementación que no olvide la
realidad imperante en el sistema capitalista perfectamente calculado sobre
bases súper liberales. Y eso fue lo que siguieron, quiérase que no,
la CHINA “comunista”, Corea del SUR, y dos que tres más, a manera
de ejemplo. Porque de no ser por las medidas capitalistas, aunque
conservando un régimen totalitario pero inteligente,seguirían siendo
pasto de
un comunismo, -que no socialismo- con sus respectivos pueblos sometidos a
un
yugo central, y en la miseria.
Entonces cabe preguntar a manera de reflexión: Las grandes empresas
afectadas con un nuevo régimen fiscal, ¿lo aceptarán sin chistar? No hay
que
olvidar que son poderosas como Televisa, por citar lo más conocido por
razones obvias. Y ni qué decir de los capitales internos y externos,
para apoyar empresas que propicien empleo, no a través de la Bolsa de
Valores; ¿seguirán pensando en México? Y, en el mejor de los casos: el
Proyecto
de Nación, ¿acabará con la corrupción incrustada en toda la estructura del
Estado, incluyendo al “Cuarto Poder”? Porque el rasero tendría que ser
parejo, y de abajo para arriba, y de arriba para abajo. Y de paso, ¿se
meterá
en cintura a los sindicatos cobijados en la CTM. CROM, CROC, UNT,
etcétera?
Porque cada cual tiene lo suyo en prebendas que urge corregir. Y no se ha
oído que este movimiento que apoya a López Obrador, rechace a los
plurinominales, para acotar el enorme presupuesto que cuesta al erario
público el “H” Congreso de la Unión.
Y viene a cuento: hace mucho que reformar la legislación fiscal, es una
propuesta
que data de varios años incluyendo a los del PRI, y claro, a los del PAN
sin
que prosperen. ¿Por qué? Porque los legisladores responden a los
intereses de los partidos políticos, no a los de la Nación. Y entonces
AMLO,
además de ganar la Presidencia de la República, también deberá contar con
mayoría absoluta en el “H” Congreso de la Unión. ¿La obtendrá? Si la
respuesta es sí; pues estaremos entrando a un Estado absolutista, que
equivale a totalitarismo y por lo tanto, dictatorial.
Aceptemos, sin
conceder: Brasil, (Lula) ha
tenido éxito en ciertos aspectos importantes que poco tienen que ver, al
menos en la forma con los que difunde López Obrador. En Venezuela, pasa
algo peor; y en Cuba ni qué decir:
la clase revolucionaria es intocable, pero nada efectiva en materia de
democracia, y economía popular. Pero en fin, esto es secundario; porque
cambiar de sistema político y económico; puede hacerse, pero a través
de una Revolución o de un golpe de Estado.
Es cierto, Lula ganó sin Revolución, ni golpe de Estado; ganó por
votación mayoritaria. Y cierto, fue acusado más que inmediatamente de
corrupción documentada, mas sin embargo se reeligió e impuso a su
incondicional sucesora, que le ayudará a volver ser electo más pronto de
lo esperado. La mayoría del pueblo está a favor de lo hecho por LULA
durante su gestión, y confía en su retorno, por ahora indirecto, pero
seguramente
directo más adelante. Ya veremos esto, porque a Brasil la falta mucho para
resolver la desigualdad social..
Entonces AMLO, sin duda podría lograr lo mismo, pero engañando al
pueblo, porque aunque haya mandado al diablo a las Instituciones, tendría
que
crear las suyas. Es decir: NUEVAS
Instituciones; pero de entrada, no basadas en la esperanza, sino
en hechos, desde su arribo al Poder. De lograrlo, claro.
Si así lo hiciera, yo votaría por él;
pero previa protesta perfectamente formalizada, de aceptar un referéndum
popular -no de acarreados- a los seis meses de tomar posesión; y
retirarse de
inmediato, antes de provocar, ahora sí, una revolución social. … Pero
antes del primer semestre del 2012
es preciso conocerse perfectamente terminado, ese “PROYECTO de NACIÖN” que
proclama como bandera electorera, que incluya su debido proceso de
implementación; y quiénes lo llevarán a cabo; para poder valorarse o
rechazarse. Insisto, antes de la votación oficial.
Pero hay algo más para dudar que López Obrador quiera
realmente un cambio; veamos:
IMSS: Ya no hay para pensiones.- Jueves 04 de noviembre de 2010 Nurit
Martínez | El Universal
“El Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) enfrenta una
"amenaza a su existencia y funcionamiento" debido a que el gasto
por servicios médicos y los pagos que realiza a los trabajadores
pensionados
y jubilados han llegado al punto de que los recursos disponibles sólo
alcanzan para financiar pensiones y prestaciones hasta el año 2012. …”
Miren ustedes,
estas noticias son las que confunden a lectores; y en su caso a radio
escuchas o televidentes. Lo que tiene así al IMSS son las pensiones de sus
propios jubilados o pensionados, y del costo ascendente de los seguros de
enfermedades y maternidad, que están por consumir las reservas
financieras. Las Pensiones bajo el régimen de las Afores
nada tienen que ver en esto. ¿Por qué? Porque lo que paga el IMSS de
pensiones propias sale de su presupuesto, pero el resto de las pensiones
a ex
trabajadores de la iniciativa privada las paga el gobierno federal con
cargo
al presupuesto púbico,
Luego entonces,
el IMSS está en peligro presupuestal porque ha consentido a un
sindicato apoyado por la “izquierda” mexicana, mismo que le ha sacado el
jugo
al presupuesto del Instituto, con prestaciones de lujo para sus
empleados y directivos. Cierto, el PRI apoyó congelar los incrementos a
futuro de las pensiones del IMSS; pero el mal ya estaba hacho. Aclaro,
cito
esto, porque el sindicato del IMSS no es el único que apoyado en amenazas
de
todo lo que ustedes puedan imaginar, obligan a las empresas para dar
prestaciones de lujo a los empleados. Y las empresas pues trasladan al
gobierno en materia de impuestos el costo; o en su defecto a los precios
de
sus respectivos servicios. ¿AMLO, cambiará esta costumbre sindical? Y
permítanme una pregunta al canto: ¿Por qué no se han aprobado las
reformas pendientes, entre las que se encuentra La Ley Federal del
Trabajo?
Pues porque al PRI con su satélite PVEM, no le han llegado al precio de la
negoción; y el PRD, PT y Convergencia pues no le van a dar por su lado al
PAN. ¡Faltaba más!
Entonces, si AMLO
representa un peligro para México, pues en mucho se lo ha ganado, porque
su
obsesión por ser presidente ha sido enfermiza, aún cuando en verdad le
hayan
ganado a la mala. Porque toda protesta tiene un límite, y la de este
personaje, y sus incondicionales no lo entienden, y las consecuencias
están a
la vista. ¿Cuáles? Tiene que apoyarse en prometer lo que él sabe muy bien
que
no puede cumplir, montado en un “socialismo” que entiende a su manera e
intereses. Lula da Silva, es lo que es y ha hecho lo que ha hecho, porque
es
un ser inteligente y por lo mismo consecuente con la realidad. Chávez y
Castro, NO, por ejemplo.
¿Qué fue lo que hizo Lula?:
“Entre oras se
encuentra la “Bolsa Familia”, como se llama a las ayudas a las familias
más
pobres. Alrededor de 46 millones de personas reciben un subsidio mensual
que
oscila entre 22 y 200 reales, equivalentes a entre 10 y 90 euros. Esta
ayuda
social asciende cada año a unos 13.000 millones de reales, unos 5.500
millones de euros. Adicionalmente la gestión de Lula ha aumentado el
salario
mínimo. Un estudio del Instituto Dieese,
cercano a grupos sindicales señala que el salario mínimo, descontando la
inflación, ha aumentado en más de un 50% entre el 2003 y el 2009.”
“El éxito no es para los que
piensan hacer algo sino para quienes lo hacen.”
Pero la
corrupción no estuvo fuera de los alcances de LULA, aunque sin duda alguna
mejoró en mucho las condiciones económicas de Brasil, campechaneando su
socialismo razonado, con el liberalismo sin excesos. Perfecciones no
existen;
pero la corrupción parece ser un mal imposible de erradicar. Quizás por
esto,
la autonomía de la Auditoría Superior de la Federación, llevada a los
estados, no se encuentra en ninguna propuesta de gobierno. ¿Estará
contemplada en el Proyecto de Nación de AMLO? Y de estarlo, ¿la respetará
de
lograr hacer realidad su enfermizo sueño presidencial? Ni
convirtiéndose en moderno dictador; porque sus compromisos son de
pronóstico
reservado, aunque no desconocidos.
Conclusión:
¡estamos fregados!
FIN
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