lunes, 29 de noviembre de 2010

Colima: El testigo

Colima se descompuso desde que la dupla Gil Díaz - Guzmán Montalvo metieron sus manos a la aduana de Manzanillo. La corrupción del narco, a partir de entonces, envolvió a la sociedad, principalmente a empresarios y altos funcionarios públicos con ambiciones políticas.



HACE UNA SEMANA la mayoría de los mexicanos amaneció con la noticia del asesinato del ex gobernador de Colima Silverio Cavazos. En las informaciones se leía que fue ejecutado frente a las puertas de su residencia, lo que habían atestiguado no sólo los miembros de su guardia, también el secretario de Fomento Económico del Gobierno del Estado, Rafael Gutiérrez Villalobos.

A partir de ese momento, las 10 de la mañana del domingo 21 de noviembre, la confusión sentó sus reales en la capital colimense. No sólo por las declaraciones contradictorias del sucesor de Cavazos en el Palacio de Gobierno, Mario Anguiano, y las de su procurador de justicia, Arturo Díaz Rivera, también por el asesinato de un médico oftalmólogo Mario Eduardo Robles Gil Bernal a manos de policías locales que de inicio falsearon las circunstancias en las que el galeno había perdido la vida.

En este anárquico galimatías, Rafael Gutiérrez Villalobos se perdió de vista. En las contradicciones, se había dicho al principio que había resultado herido aunque no de gravedad. Luego, que había resultado ileso. Y nada más.

¿Qué pasó con Gutiérrez Villalobos quien es sin duda alguna el principal testigo del ataque mortal al ex mandatario colimense? ¿Por qué estaba en ese lugar y en ese momento, precisamente? ¿Por mera circunstancia? ¿Tal vez a propósito?

Más aún, ¿quién es este Rafael Gutiérrez Villalobos?

Una indagación rápida refiere que el secretario de Fomento Económico proviene de las filas empresariales. Fue dirigente estatal de ese grupo de presión denominado Canacintra –que, menguado, en realidad ya sólo favorece los intereses político-empresariales de su cacique Jorge Kahwagi Macari-- y, un muy adelantado aspirante a suceder al actual gobernador de esa entidad del Pacífico quien apenas lleva un año en el cargo.

Y es que justo una semana antes del atentado mortal contra Cavazos, se había publicado, bajo el título “Prospecto Estrella”, un amelcochado panegírico a Gutiérrez Villalobos:

“Los felices trabajadores y empleados que durante los últimos quince años han desfilado por sus empresas, la clientela satisfecha que en el mismo lapso hizo(,) y sus agradecidos proveedores, más sus múltiples amigos en Canacintra con los que ha sido tan solidario, serían los más entusiastas promotores de sus candidaturas tan pronto como se formalicen(,) llegados los tiempos y las fechas”. Candidaturas, sí. Primero diputado o senador. Después la candidatura priísta al gobierno de Colima.

Sus felices trabajadores son empleados de sus tiendas de abarrotes. Sus clientes, quienes adquieren en ellas sus comestibles. Sus agradecidos proveedores…

Pero también tiene trabajadores “policías”. Gutiérrez Villalobos es copropietario de una empresa de seguridad privada denominada Roka, sobre la que en algún momento no muy lejano la PGR, concretamente la SIEDO, mantuvo vigilancia.

En un correo electrónico llegado a mi buzón aparece el comentario siguiente. No incluyo el nombre de la dependencia pública de la cual se trata para evitar represalias a quien me hace llegar la información:

“El secretario de Fomento que estaba en ese momento con Silverio (Rafael Gutierrez) es el dueño de Roca, la empresa de seguridad que contrata (aquí el nombre de la dependencia)…No sé si sabes, pero en una ocasión me fueron a ver de la PGR para pedirme que no le asignara contratos a Roka pues era dinero del narco. Les pedí que me lo dieran por escrito o que lo hablaran con mis superiores. Ya nunca regresaron y sí se le tuvo que asignar ese contrato pues no había elementos para descalificarlos. De ese personaje se hablan muchas cosas desde hace años. Ahora con esto no se sabe si va a continuar pues es el principal testigo…”

Ostentoso, conservador –a grado tal que lo han comparado con Onésimo Cepeda y con Sandoval Íñiguez-- Gutiérrez Villalobos tiene una empresa exitosa con presencia no sólo en Colima, también en Michoacán, Jalisco y Baja California, entidades todas con fuertes problemas de seguridad provocados por la narcodelincuencia. Una “ruta” que va al norte, además.

¿Qué hacía Gutiérrez Villalobos con Cavazos al momento de ser este baleado?

Una semana después de tantas confusiones, los reflectores deberían ponerse sobre el secretario de Fomento Económico y, claro, principal aspirante a suceder a Anguiano ¡dentro de cinco años!



Índice Flamígero: En Manzanillo, Colima, dos días después del asesinato del ex gobernador Jesús Silverio Cavazos en la capital de esa entidad, el señorFelipe Calderón advirtió que el esclarecimiento del caso será “hasta las últimas consecuencias”, por lo que no deberá desecharse ninguna de las líneas de investigación.



www.indicepolitico.com / pacorodriguez@journalist.com

No hay comentarios:

Publicar un comentario